La vivienda se conceptualiza como un hito arquitectónico integrado en la ladera de la montaña, donde el diseño se articula en armonía con la topografía del terreno. La propuesta busca generar una serie de espacios privados y únicos, aprovechando las condiciones naturales del emplazamiento para crear una conexión visual y emocional entre el interior y los impresionantes horizontes exteriores. La materialidad del proyecto refuerza su integración con el contexto, empleando texturas y tonos que evocan la paleta cromática del entorno natural. La combinación de ladrillo, madera y acero no solo aporta durabilidad, sino que también añade un carácter contemporáneo y atemporal al diseño. En síntesis, la vivienda no solo responde a las necesidades funcionales de sus habitantes, sino que también se erige como una obra arquitectónica que celebra su entorno natural, ofreciendo una experiencia espacial y visual excepcional. La vivienda se conceptualiza como un hito arquitectónico integrado en la ladera de la montaña, donde el diseño se articula en armonía con la topografía del terreno. La propuesta busca generar una serie de espacios privados y únicos, aprovechando las condiciones naturales del emplazamiento para crear una conexión visual y emocional entre el interior y los impresionantes horizontes exteriores. La materialidad del proyecto refuerza su integración con el contexto, empleando texturas y tonos que evocan la paleta cromática del entorno natural. La combinación de ladrillo, madera y acero no solo aporta durabilidad, sino que también añade un carácter contemporáneo y atemporal al diseño. En síntesis, la vivienda no solo responde a las necesidades funcionales de sus habitantes, sino que también se erige como una obra arquitectónica que celebra su entorno natural, ofreciendo una experiencia espacial y visual excepcional.